La pasada semana, creo que no había medio de comunicación que no se hubiera hecho eco de la noticia de que el Consejo de Ministros había aprobado el real decreto que permitirá a los ciudadanos que cuenten con planes de pensiones, rescatar su dinero tras 10 años, a partir de 2025. De este modo, a partir de 2025 quienes dispongan de un plan de pensiones podrán retirar el dinero depositado en él a cierre de 2015.

 Antes de entrar cuestiones de fondo, sería fundamental diferenciar dos momentos clave, que son: “aportaciones al plan” y “el momento del rescate”. En el presente “consejo de la semana” nos centraremos en la tributación en el momento de su recate.

 Siempre hemos oído hablar de los planes de pensiones, fundamentalmente a la hora de llevar a cabo una planificación en el IRPF y sobre todo pensando en la jubilación, pero ¿cómo funciona un plan de pensiones? ¿cómo  y cuándo tributan?¿qué formas hay de rescatarlos?¿cuál es la más ventajosa?

 En este artículo, trataremos de forma breve, dar respuesta a ello.

 ¿Cómo funciona un plan de pensiones?

A modo de resumen podríamos decir, que durante la vida del producto (plan de pensiones) irás aportando dinero que el plan invertirá. Mientras tanto, ese dinero que vas aportando, te servirá para pagar menos impuestos en tu declaración del IRPF. Su ventaja fiscal es que durante este tiempo de  “aportación al plan”  podremos deducirnos por las aportaciones realizadas y no tendremos que pagar impuestos por los rendimientos que este pueda generar. Pasado un tiempo determinado, podrás recuperar el capital, siendo este el momento el que tendrás que tributar.

 ¿Cuándo se puede rescatar el plan de pensiones?

A diferencia de otras inversiones a largo plazo para la jubilación, los planes de pensiones sólo se pueden recuperar solo en determinados momentos marcados por la ley.

Los supuestos para poder rescatar un plan de pensiones se dividen principalmente en dos grupos en función del momento en que se rescatan:

      a)  Rescate del plan por jubilación del beneficiario

           Este es el principal motivo del rescate y para el que generalmente están ideados los planes de pensiones, lo que al fin y al cabo quiere decir que por lo general son un complemento a la     pensión pública.La jubilación es la forma tradicional de acceder al dinero del plan de pensiones.

      b)  Rescatar el plan de pensiones antes de la jubilación del beneficiario

La jubilación es la forma tradicional de acceder al dinero del plan de pensiones, pero hay otras que te permitirán hacerte con el plan sin llegar a jubilarte. Estos motivos son, principalmente:Invalidez laboral total del beneficiario.

    Fallecimiento del beneficiario.
    Paro de larga duración
    Para evitar el deshaucio de la vivienda.
    Pasados 10 años desde la primera aportación (tras la reforma fiscal de 2015)

¿Qué formas existen de rescate del plan de pensiones?

    En forma de capital: en este caso se cobran todas las aportaciones más los rendimientos, de una sola vez y mediante un pago único.
    En forma de renta: quizás la forma más habitual y supone la percepción de una cantidad ya pactada a decisión del titular, periódicamente, (mensual, trimestral, semestral o anual).
    En forma mixta: una parte se recupera en forma de capital y la otra como renta.
    En forma de renta asegurada o de seguros: fórmula menos habitual.

¿Cómo tributa el rescate del plan de pensiones?

Antes de todo, hay dos cuestiones fundamentales a tener en cuenta. La primera es que los planes de pensiones tributan como rendimiento del trabajo y la segunda es que pagarás impuestos por todo lo ahorrado y no sólo por los beneficios.

Cada forma de rescate, tiene sus ventajas e inconvenientes, además de hacerte pagar más o menos impuestos.

    a. Rescate del plan de pensiones en forma de capital

El rescate del plan de pensiones en forma de capital ha estado bonificado  hasta la última reforma, que ha establecido un periodo transitorio para esta ventaja. Se podrá aplicar una reducción del 40% sobre la parte de la prestación ligada a las aportaciones que sean anteriores a 2007 siempre y cuando hayan transcurrido más de dos años desde la primera aportación. Esto se traduce en que quienes se jubilen en 2017 van a poder practicar la reducción del 40% durante un máximo de tres años, es decir, el año en que se jubilan y los dos años siguientes.

Sin embargo, la desventaja de optar por cobrarlo en forma de capital es que al recuperar así el dinero, tu  base imponible crecerá de golpe y puede llevarte a tributar en los tramos de IRPF más altos del IRPF(hasta 45% para las rentas más altas). Y es que el dinero del plan de pensiones no tributa al tipo de la renta del ahorro como lo hacen por ejemplo los fondos de inversión, depósitos …, sino que lo hace al tipo marginal que nos corresponda, como los rendimientos del trabajo.

      b. Rescate del plan de pensiones en forma de renta

Si optamos por esta forma, ésta se considerará como un rendimiento del trabajo y por lo tanto habrá que tributar por él según lo que marquen las tablas de IRPF, desde el 19% hasta el 45% en el ejercicio 2017.

La desventaja en este caso es que pagaremos impuestos por nuestros derechos consolidados, es decir, no sólo por el beneficio de las inversiones, sino que también por el dinero aportado.

 Rescate del plan de pensiones mixto

El rescate mixto supone, combinar ambas alternativas y personalmente entiendo, que en un sector importante de la sociedad, puede ser la mejor opción.

Conclusiones:

Que hay dos cuestiones básicas que debes tener en cuenta. La primera es que los planes de pensiones tributan como rendimientos del trabajo y la segunda es que pagarás impuestos por todo lo ahorrado, no sólo por los beneficios.

Que la pregunta es: ¿cómo rescato el plan de pensiones para pagar menos impuestos? Si bien la respuesta a priori pudiera ser  “recupera el plan en forma de renta”, no siempre es esta la mejor opción ya que si tienes importantes rentas anteriores a 2007 te puedes aprovechar la exención y de disponer de dinero los primeros años tras jubilarte, pueden ser precisamente para muchos, cuando más se disfrute.

Que al fin y al cabo, se trata también de valorar tus circunstancias personales. Y que llegado el momento del rescate, se tributará,  no sólo por el beneficio de las inversiones, sino que también se hará por todo el dinero aportado años atrás. Nadie regala nada. Este es el gran truco de la fiscalidad del plan de pensiones.